Me pregunto si soy la única que ve triste, incluso ridículo que una pareja en crisis pase su tiempo libre viendo el fútbol en casa de los vecinos, cotilleando la mujer, gritando el hombre.

Me pregunto si soy la única que ve triste, incluso ridículo que nuestra sociedad base la familia en un núcleo estable de una pareja. Que se escriba un para siempre.

Me pregunto si soy la única que se pregunta cómo alguien puede afirmar cosa tan grave, como alguien puede pensar que algo es eterno, y que las cosas subsisten solas.

Y me parece tan imprudente establecer la forma de vida de una sociedad sobre unos cimientos que se caen.

Tan ingenuo, tan idiota.

Tan conformista pensar, que sin más las cosas son así, que el peón no puede ir en diagonal.

Y de verdad, se me inundan los ojos de lagrimas al pensar en el sufrimiento al que llevan las rupturas, los divorcios, los problemas familiares....Se me inundan los ojos de lagrimas,y la boca de rabia.
Porque más que pena, me produce indignación la cantidad de energía que se dedica a preocuparse por eso.

¿Subestimo los sentimientos? Por supuesto que no.
Y es lógico una parte de nostalgia, o nose, de pena quizás. Pero realmente...

Si todo viene y va...y el mundo...el mundo no es caos, las cosas se regulan. El mundo es equilibrio...

Y las personas con ello, vienen y van, , van y vienen y el mundo no se detiene.